Datos personales

Mi foto
Twitter @jimenaladu

martes, 4 de septiembre de 2012

La contracultura, las vanguardias, los beat y la ciencia ficción



RoszakEl surgimiento de la contracultura influye, definitivamente, en la evolución del cine y de las artes. El término de contracultura fue empleado por el historiador norteamericano Theodore Roszak, en su libro El nacimiento de una contracultura en 1968. En este libro el autor admite que la inconformidad comenzó a mediados de los años cincuenta y no estuvo limitada a los jóvenes. Sin embargo, la superficialidad y el conformismo de las protestas adultas, no lograron los alcances de los movimientos izquierdistas de jóvenes estudiantes. El autor delimita el movimiento contracultural, en donde sólo convergen una estricta minoría de jóvenes y unos cuantos mentores (adultos). De esta contracultura están excluidos la juventud más conservadora, los jóvenes marxistas que siguen avivando la revolución del proletariado; la cultura juvenil más liberal (según el autor, al estilo Kennedy); y militantes negros.
La contracultura significa la deserción de la larga tradición de la intelectualidad escéptica, que sirve de dirección a la sociedad, desde que comienza la ciencia (Copérnico y Kepler, precursores del método científico) y la técnica en occidente. La generación joven decide abandonar esa tradición y se opone a la sociedad tecnócrata, a través de la exploración del comportamiento concreto de la conciencia, en donde la experiencia psicodélica (los medios químicos se convierten en un fin psíquico) se muestra como, uno entre otros, de los métodos posibles para realizar dicha exploración.
Busco mi destino (Easy rider, 1969) de Dennis Hopper, es un referente para los que se sentían inmersos en esta contracultura. Los protagonistas, dos jóvenes estadounidenses emprenden un viaje en sus motocicletas, alrededor de los Estados Unidos, sin otro objetivo que el de encontrar aventura. En este camino se encuentran con un granjero y su familia, con una comuna hippie, con la cárcel, con un viaje ácido acompañados de dos prostitutas y con la muerte. La banda sonora con temas de Jimi Hendrix, Steppenwolf, Byrds y The Band, nos ambientan en la cultura juvenil de ese momento que sólo buscaba el encuentro de su conciencia con la naturaleza y su propio destino,  sin rumbo definido y expuesto completamente a la naturaleza del mundo y del ser humano. Con la canción de Born to be wild, de Steppenwolf simplemente entendemos el significado de la película, una llamado a la aventura sin importar consecuencias, es un llamado al reconocer de tu instinto más irracional. La libertad de la juventud de los sesentas, no puede ser mejor evocada como en esta película, símbolo fílmico de la juventud del mundo y vetada por las autoridades en nuestro país.
La literatura contribuye a crear una nueva perspectiva en los jóvenes. La generación beat, surge en los años cincuenta, entre sus autores más destacados se encuentra Allen Ginsberg con Howl (1956), En el camino (1957) de Jack Kerouac y Almuerzo al desnudo (1959) de William S. Burroughs (de este libro David Cronenberg realiza una película en 1991). Los beatniks rechazan los valores estadounidenses clásicos, proclamaban el uso de drogas,  libertad sexual y el estudio de la filosofía oriental. Presentaban un gusto ecléctico por los fenómenos místicos, ocultos y mágicos. Allen Ginsberg profesa la búsqueda de Dios en sus poemas, antes de que él mismo descubriera el zen y las tradiciones místicas de oriente.

En los años sesenta surgen dos promotores de los agentes psicodélicos: Timothy Leary y Ken Kessey. Leary surge como pionero en la investigación psicodélica en los primero años de los sesenta. Crea laLiga para la revelación espiritual,  que tiene lugar en septiembre de 1966, en esta liga se pregona el uso de LSD para llegar a un éxtasis religioso.
A la par, Ken Kessey con su novela One Flew Over the Cuckoo's Nest (1962) (esta obra fue adaptada para cine, con el mismo nombre, dirigida por Milos Forman y actuada por Jack Nickolson en 1975), profesa la experimentación lúdica y espiritual con LSD y marihuana (era pionero en este tipo de prácticas masivas). Learly y Kessy organizaban eventos públicos masivos en convenciones abiertas para el consumo de LSD y el contacto con la religión.
El género de ciencia ficción, tiene un gran desarrollo durante 1951-1965. Crónicas marcianas (1950) y Fahrenheit 451 (1953) de Ray Bradburry, Mercaderes del espacio (1953) de Frederik Pohl y Cyril M. Kornbulth y Naranja mecánica (1962) de Anthony Burgess, muestran una sociedad futurista degradada y sometida a un estado de represión y de control, bajo una apariencia quimérica. Estas novelas distópicas señalan las consecuencias sociales de continuar con los enfrentamientos globales, dos guerras mundiales, una bomba atómica, la Guerra Fría, avances tecnológicos, si seguían viviendo esta forma de vida.

Una distopía, por tanto, se considera lo contrario a la utopía, o una utopía negativa.  En estas novelas está implícita una forma autoritaria o totalitaria de gobierno (diferentes sistemas de represión y de control social (político y/o militar), la falta o ausencia de libertades individuales). Las novelas distópicas expresan constantemente estados de guerra y violencia. En el caso de Naranja mecánica y deCrónicas marcianas, se explora el abuso de la tecnología por los seres humanos y de cómo estos la enfrentan. 
La propagación de la cultura juvenil, acompañada de las disidencias generacionales, las nuevas actitudes sexuales, los movimientos estudiantiles y la radicalización política, empaparon el ámbito de lo fílmico, reflejado en los movimientos fílmicos como el neorrealismo italiano, la nouvelle vague, cine underground estadounidense y el free cinema inglés, que se suman a otros movimientos de cine independiente y alternativo que florecen en el mundo.